Uno de los mayores problemas a la hora de diagnosticar el TDAH reside en la falta de pruebas o test que nos permitan dar con un diagnóstico objetivo. Es posible que esta situación continúe siendo así por poco tiempo. Hasta el momento la mayoría de los diagnósticos realizados se basan en el informe escolar, que realiza el orientador del centro con las aportaciones de los profesores; en el cuestionario que realizan los padres o personas del entorno más cercano del menor; y en la observación del niño.
Esta forma de diagnóstico nos lleva a cierta subjetividad. Acaba dependiendo del momento en el que se realiza la observación, el menor con tdah no siempre mantiene la misma conducta, y de quién y en qué momento realiza el cuestionario. He visto padres que, respecto al mismo hijo y en el mismo momento, han respondido a algunos items de forma distinta, y no es tan extraño, ya que en algunos item cabe la interpretación personal.
Esta forma de diagnóstico nos lleva a cierta subjetividad. Acaba dependiendo del momento en el que se realiza la observación, el menor con tdah no siempre mantiene la misma conducta, y de quién y en qué momento realiza el cuestionario. He visto padres que, respecto al mismo hijo y en el mismo momento, han respondido a algunos items de forma distinta, y no es tan extraño, ya que en algunos item cabe la interpretación personal.
El DSM-IV (Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales), establece que:
- No hay pruebas de laboratorio que hayan sido establecidas como diagnósticas en la evaluación clínica del trastorno. En algunos grupos de sujetos con trastorno por déficit de atención con hiperactividad se ha observado que ciertas pruebas que requieren procesamiento mental persistente ponen de manifiesto rendimientos anómalos en comparación con sujetos de control, pero todavía no está definido qué déficit cognoscitivo fundamental es responsable de este fenómeno.
- No existen características físicas específicas asociadas al trastorno por déficit de atención con hiperactividad, aunque pueden producirse algunas anomalías físicas menores (p. ej., hipertelorismo, paladar ojival, implantación baja de los pabellones auditivos) con una frecuencia superior a la observada en la población general. También puede darse una frecuencia superior de lesiones físicas (accidentes).
Sin embargo, también establece los criterios por los que nos regimos los profesionales para poder aproximarnos a un diagnóstico, y que son los criterios que en forma de item conforman los cuestionarios a los que hacía referencia anteriormente, que cumplimentan padres y/o profesores. Estos criterios se dividen en función de las tres áreas a las que afecta el tdah: hiperactividad, impulsividad y déficit de atención.
Criterios para el diagnóstico del TDAH
Criterios para el diagnóstico del TDAH
Ya en el año 2010, un equipo de investigadores de la Universidad Autónoma del hospital Vall d'Hebrón y del centro CRC- Corporación Sanitaria de Barcelona, ha llevado a cabo un estudio que pudiera modificar esta situación y finalmente aproximar un diagnóstico más objetivo del tdah. Su hipótesis se basa en que, junto a otras zonas afectadas del cerebro, el tdah puede deberse a una alteración en un área del cerebro, en concreto al núcleo accumbens, zona relacionada con el placer y la recompensa.

Hola,
ResponderEliminarMe ha gustado mucho el artículo y el vídeo.
Para padres que tenemos hijos con tdah este tipo de blogs son de mucha ayuda.
Gracias por tu esfuerzo.